El cabello se clasifica en diferentes categorías que requieren cuidados especiales. ¿Cómo definir tu tipo de cabello? Hacemos balance.

Así como existen diferentes tipos de piel, existen diferentes tipos de cabello clasificados según su textura, forma y otras características específicas que ayudan a establecer un curso de acción preciso para adoptar la rutina capilar adecuada y prometerles buena salud.

Los diferentes tipos de cabello y sus características.

Cabello liso : El cabello liso es liso y no tiene rizos ni ondas, cae como una cortina sobre los hombros.

Cabello ondulado : El cabello ondulado tiene una textura intermedia entre el cabello liso y el cabello rizado. El cabello ondulado forma ondas suaves y pueden ser más o menos pronunciadas según la persona.

Cabello rizado : El cabello rizado tiene rizos anchos, definidos, en forma de espiral o rizos apretados pero suaves, todo depende de la estructura inicial del cabello.

Cabello rizado : El cabello rizado tiene rizos muy apretados y apretados, creando una textura más densa y voluminosa.

Cabello rizado o cabello afro : El cabello rizado es extremadamente rizado, a menudo en forma de Z y tiende a ser muy denso y tirante. Pueden variar en tamaño y forma de rizos.

Además de estos tipos de cabello en función de su forma, el cabello también se puede clasificar en función de su grosor:

Cabello fino : El cabello fino tiene un diámetro menor y tiende a ser más delicado.

Pelo medio : El pelo medio tiene un diámetro que no es ni demasiado fino ni demasiado grueso.

Pelo grueso : El pelo grueso tiene un mayor diámetro y es más robusto.

Finalmente, el cabello se puede clasificar según su nivel de porosidad:

Cabello de baja porosidad : El cabello de baja porosidad tiene cutículas apretadas y es resistente a la absorción de humedad.

Cabello de porosidad media : El cabello de porosidad media tiene una capacidad equilibrada de absorción de humedad.

Cabello de porosidad alta : El cabello de porosidad alta tiene las cutículas más abiertas, lo que hace que sea más probable que absorba la humedad, pero también que la pierda rápidamente.

Comprender el tipo de cabello que tienes es fundamental, ya que esto te ayudará a elegir los productos y tratamientos capilares más adecuados para tus necesidades específicas. Cada tipo de cabello tiene características únicas y requiere un enfoque diferente para mantenerlo y peinarlo mejor.

¿Cómo determinar tú mismo tu tipo de cabello?

Determinar tú mismo tu tipo de cabello puede resultar muy útil a la hora de elegir los productos y tratamientos que se adapten a tus necesidades específicas. A continuación te explicamos cómo puedes hacerlo tú misma para identificar la forma, el grosor y la porosidad de tu cabello y crear la mejor rutina capilar:

1. Determina la forma de tu cabello (liso, ondulado, rizado o encrespado):

Probablemente esto es lo que definimos desde el principio, la forma del cabello la percibimos desde la infancia pero puede pasar que la hayamos camuflado durante tanto tiempo que ya no sepamos realmente cómo definirla.

Para determinar o recuperar la forma de tu cabello, sigue estos pasos:

° Lava y acondiciona tu cabello como de costumbre.

° Deja que tu cabello se seque naturalmente sin peinarlo ni utilizar productos de peinado.

° Observa la forma natural de tu cabello después de que se haya secado. Si tu cabello es perfectamente liso, tienes el cabello liso. Si tiene ondas suaves, tienes el cabello ondulado. Los rizos definidos indican cabello rizado, y los rizos muy apretados o en forma de Z necesariamente indican cabello encrespado.

2. Determina el grosor de tu cabello (fino, medio, grueso):

Para evaluar el grosor de tu cabello, puedes:

° Toma una sola sección de cabello limpio y seco entre tus dedos y siente su textura.

° Si el mechón de cabello apenas se nota o es difícil de sentir entre los dedos, tienes el cabello fino.

° Si puedes sentir el mechón de cabello entre tus dedos, pero no lo sientes grueso ni fino, tienes cabello mediano.

° Si la sección de cabello es notablemente gruesa y fácil de sentir entre tus dedos, tienes cabello grueso.

3. Determina la porosidad de tu cabello (baja, media, alta):

La porosidad del cabello se refiere a su capacidad para absorber y retener la humedad. A continuación te explicamos cómo determinar la porosidad de tu cabello:

° Tome una sección de cabello limpia y seca.

° Observar la hebra de cabello para identificar si hay pequeñas grietas o poros visibles en la cutícula (la capa externa del cabello).

° Si la cutícula aparece lisa y cerrada, tienes un cabello de porosidad baja. Si se ve ligeramente abierto, tienes un cabello de porosidad media. Si se ve muy abierto, tienes un cabello de porosidad alta.

¿Cabello graso, cabello seco o cabello normal?

Para determinar tu tipo de cabello (graso, seco o normal), puedes tener en cuenta algunos signos y características específicas. A continuación se ofrecen algunas pautas para identificar su tipo de cabello:

Cabello graso:

El cabello graso tiende a engrasarse rápidamente después del lavado, a menudo en un día o menos. Es posible que notes una apariencia grasosa o aceitosa en el cuero cabelludo, las raíces y, a veces, incluso en los largos. El cabello graso puede sentirse pesado, plano y sin volumen. También puede experimentar picazón en el cuero cabelludo o caspa grasa.

Cabello seco:

El cabello seco luce opaco, áspero y quebradizo. Es posible que experimentes frizz y cabello suelto que sean difíciles de controlar. El cabello seco tiende a carecer de humedad y puede ser propenso a tener puntas abiertas. Necesitan cuidados hidratantes adicionales ( sérum capilar , mascarillas, acondicionador) para mantener su brillo y suavidad.

Cabello normal:

El cabello normal luce sano y equilibrado. No son ni demasiado grasosos ni demasiado secos y son relativamente fáciles de peinar. Normalmente puedes esperar unos días antes de volver a lavarlos sin que se engrasen ni se sequen demasiado.

Si tienes problemas para determinar tu tipo de cabello exacto, intenta seguir estos pasos:

1 - Lávate el cabello con un champú suave sin sulfatos para eliminar cualquier acumulación de productos capilares o sebo.

2 - Deja que tu cabello se seque de forma natural sin peinarlo ni utilizar productos de peinado.

3 - Observa atentamente el aspecto de tu cabello después de que se haya secado. Si notas signos de grasa, sequedad o si tu cabello parece sano y equilibrado, podrás identificar tu tipo de cabello.

Tenga en cuenta que el tipo de cabello puede variar dependiendo de diferentes factores como la estación, el clima, el uso de productos para el cabello y la salud en general. Si tienes problemas persistentes con tu cabello o no estás seguro de su tipo, no dudes en consultar a un profesional del cabello o dermatólogo para obtener un asesoramiento personalizado.