Tez perfecta: nuestros consejos para una piel estupenda, ¡incluso sin base!
Tez perfecta: nuestros consejos para una piel estupenda, ¡incluso sin base!
Coralie Techer
¿Un cutis impecable sin maquillaje parece imposible? No cuando tienes los consejos adecuados y adoptas la rutina de belleza adecuada. Hábitos alimentarios, cuidados de la piel preferidos… ¡Te contamos todo lo que necesitas saber para tener una piel bonita sin base!
Una vida diaria agitada puede alterar rápidamente el aspecto de nuestra piel... Entre la contaminación, la comida chatarra, el estrés y todos los demás parásitos que se pueden añadir a nuestra vida diaria, no tiene nada de sorprendente sufrir una piel deteriorada y en mal estado. Para remediar esto, sólo hace falta adoptar buenos hábitos.
Paso 1: conoce tu tipo de piel
Antes de abordar un problema, siempre intentamos comprender su origen y cuál es la mejor manera de abordarlo. Es lo mismo cuidar tu piel. ¡Cada ser es único, lo mismo ocurre con la piel que cumple ciertos criterios para ser categorizada! Mixta, grasa, seca, sensible, dependiendo de su definición, la piel requerirá cuidados específicos. Por ello, es fundamental, antes de emprender cualquier rutina, diagnosticar tu tipo de piel. Hay muchas pruebas disponibles en Internet, pero lo mejor es consultar a un profesional (un dermatólogo, por ejemplo), para asegurarse de tomar la decisión correcta.
Para comprender mejor su tipo de piel:
- Piel mixta: seca en las mejillas y grasa en la zona T (frente, nariz, mentón). Hidratar con una crema hidratante ligera o un suero floral acuoso.
- Piel seca: ¡se siente tirante y puede tener escamas! La piel seca requiere una hidratación rica, con crema, gel o bálsamo.
- Piel sensible: es muy reactiva al frío, al calor, al viento… en definitiva, a todo tipo de agresiones externas. Un tratamiento suave y calmante (como el aceite de rosa mosqueta) es lo mejor para este tipo de piel.
- Piel grasa: la piel grasa sufre un exceso de sebo en todo el rostro. Puede tener imperfecciones (espinillas, puntos negros). Contrariamente a la creencia popular, ¡la piel grasa requiere una buena hidratación! Nos aseguramos de limpiarlo suavemente con jabones neutros y elegimos tratamientos matificantes.
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Paso 2: adopta una dieta sana y equilibrada
No existe una receta milagrosa, todo lo que ingerimos acaba reflejándose en nuestra piel. Para una piel uniforme, tersa y luminosa, debemos asegurarnos de comer de forma sana y equilibrada (permitiendo pequeñas desviaciones por placer). Cómo ? Evitamos al máximo las grasas saturadas y los azúcares refinados (platos para recalentar, embutidos, bollería industrial, salsas industriales… en definitiva, todo lo industrial). Añade mucha fruta (rica en agua y vitaminas) a tu dieta. Pero ojo, la fruta se consume como snack, en el desayuno o como merienda. Evita tomarlo como postre para no sufrir hinchazón porque los frutos fermentan en el estómago al entrar en contacto con otros alimentos. ¡El alimento ideal (casi mágico) para un cutis radiante son las zanahorias! No, no te hace adorable pero sí puede darnos el cutis perfecto.
Los beneficios del caroteno: ¡ Incorporar caroteno a tu dieta sería una excelente manera de mantener tu cutis fresco y luminoso de forma natural! Para qué ? El betacaroteno presente en las zanahorias es rico en vitamina A. Una vitamina que potencia y fortalece la epidermis a la vez que la hace más radiante. Lo ideal es beber jugo de zanahoria todas las mañanas para un tratamiento de tres semanas. Para variar la alimentación y los placeres, la papaya, la calabaza o incluso el mango (todos ellos contienen caroteno) son también muy buenos aliados para una tez radiante.
Bebe mucha agua: obviamente, el caroteno no es un ingrediente milagroso (¿casi?), aparte hay que tener en cuenta que la hidratación sigue siendo la base de una piel sana (y de un cuerpo sano). Nos hidratamos regularmente durante todo el día (hasta 1,5 L). Para no olvidar tu dosis diaria de agua, mantén una pequeña botella cerca de ti, ¡que te asegurarás de llenar tan pronto como veas el fondo! Si el agua nos atrae, podemos desintoxicarla mediante decorándola con cítricos como limón, naranja o incluso hojas de menta, maracuyá, fresas o frambuesas… En definitiva, cualquier cosa que nos dé ganas y que pueda hacer que el agua sea más apetecible haciéndonos bien.
Paso 3: adopta las acciones correctas en tu vida diaria
Si llevar una dieta equilibrada es un buen gesto en sí mismo, hay otros que adoptar para completar nuestra rutina de belleza y tener una piel naturalmente bella.
- Dormir lo suficiente: parece obvio, ¡pero en Francia no somos los mejores estudiantes en cuanto a cuota de sueño! Los noctámbulos son algo común, pero a menudo es nuestro ritmo de vida lo que nos impide hacer lo contrario. Lo mejor es organizar bien tus días, dejar de trabajar a las 17:30 o 18:00 horas (¿un expediente no está completo? Lástima, puede esperar hasta mañana). Cenar temprano (19.00 horas) para facilitar la digestión, relajarse frente a una buena película (o cualquier otra actividad popular) y finalmente cerrar todas las pantallas una buena hora antes de acostarse (la luz azul es un estimulante, además de dañar la piel). !). 8 horas de sueño son necesarias para que los adultos regeneren su energía adecuadamente.
- Evitar sustancias adictivas: es más fácil decirlo que hacerlo. Sin embargo, dejar de lado el tabaco y el alcohol son dos factores esenciales e importantes si se quiere recuperar una tez de porcelana sin forzar la dosis en la brocha de maquillaje.
- Practica gimnasia facial: también conocida como yoga facial, la gimnasia facial es una serie de ejercicios que consisten en trabajar los músculos presentes en esta parte del cuerpo para evitar la flacidez o el exceso de grasa. Los tutoriales se pueden encontrar fácilmente en YouTube e incluso se han publicado libros sobre el tema (ver “Yoga facial” de Sylvie Lefranc). Esta tendencia tiene muchos seguidores y los resultados son fiables: elasticidad, piel tersa, tez luminosa (microcirculación sanguínea activada).
- Aplica tu crema hidratante Y tu protector solar diariamente: dos acciones que se olvidan rápidamente en el frenesí de la vida. Hidratar tu piel y protegerla del sol es fundamental. Para evitar manchas, envejecimiento prematuro y cualquier otro problema relacionado con el sol.