¡Usar perfume es un arte! Para garantizar un aroma divino durante todo el día, aquí tienes los mejores consejos y trucos prácticos a aplicar.

Desde los albores de los tiempos (o casi), el ser humano ha usado perfume. Utilizar aceites vegetales y aceites esenciales, frotar ámbar en el cuerpo o tomar baños perfumados con flores. Todos tenemos nuestra propia firma olfativa, nuestro olfato actúa como marcador y algunos estudios incluso demuestran que está en el origen de nuestras diferentes afinidades entre nosotros. Por tanto, no es de extrañar que el perfume ocupe un lugar tan destacado en nuestra vida cotidiana... En Francia, se venden 152.000 perfumes al día, es decir, más de 1,6 frascos de perfume por segundo y 55,4 millones al año, lo que supone menos de una botella por habitante al año según el sitio de estadísticas globales en tiempo real: planetscope.com.

El arte de llevar perfume, nuestra guía completa

Llevar bien el perfume no es simplemente cuestión de rociar tu eau de toilette o eau de parfum* a toda prisa. No, requiere cierta destreza, una mano amiga para aprender, hábitos que establecer. Para que el jugo despliegue sus notas a tu paso el mayor tiempo posible, es necesario saber aplicarlo.

*¿Cuál es la diferencia entre eau de parfum y eau de toilette?

Perfuma tu piel: ¿dónde y cómo pulverizar tu perfume?

Elija el aroma adecuado: opte por un aroma que coincida con su gusto y personalidad personales. Prueba diferentes fragancias para encontrar la que más te convenga. Asegúrate de considerar la temporada, ocasión y ambiente en el que usarás tu tipo de perfume. Por ejemplo, en invierno preferimos un eau de parfum porque su mayor concentración olfativa durará más en la piel y se percibirá mejor que en verano, donde podría parecer demasiado pesado o incluso embriagador.

Favorecer los puntos de pulso: Los puntos de pulso son áreas del cuerpo donde los vasos sanguíneos están más cerca de la superficie de la piel, lo que genera calor y ayuda a difundir el aroma. Estos lugares estratégicos son las muñecas, el cuello, detrás de las orejas, dentro de los codos y detrás de las rodillas. Aplica el perfume en uno o más de estos puntos para una difusión óptima. Tenga en cuenta que el perfume se aplicará mejor sobre la piel seca que sobre la piel sucia y húmeda.

Pulverizar o aplicar ligeramente: Utilice un spray ligero o unas gotas del perfume. Lo mejor es empezar con una pequeña cantidad y ajustar según tus preferencias. Evite sobrecargarse con perfume, ya que puede resultar abrumador para usted y las personas que lo rodean.

Retoque si es necesario: El poder de permanencia del perfume puede variar dependiendo de la concentración y calidad de la fragancia, así como de la química de su propio cuerpo. Si desea revivir el aroma a lo largo del día, puede volver a aplicarlo ligeramente en los puntos del pulso o rociando una suave nube de aroma a su alrededor. Este último método

¿Errores a evitar al aplicar perfume?